No es muy normal que una afición se alegre tanto porque uno de sus ídolos se vaya a trabajar en otro club del mismo país. Pues bien, la llegada del profesor Alexis Márquez a Jaguares llenó de alegría al pueblo matecaña que compartió con orgullo este nombramiento.

Y más allá de todo lo que deportivamente le dio al Pereira como jugador y técnico, esa felicidad se da por la gran persona que es Alexis, su carisma y humildad le ha abierto muchas puertas.

Como arquero tuvo buenos y malos momentos, como técnico ha tenido más buenos que malos resultados, pero siempre ha sido el mismo buen ser humano.

Y los buenos se rodean de buenos, por eso lo acompañarán nuevamente el gran entrenador Rubén Zapata y el preparador físico Diego Vargas, excelentes profesionales, pero ante todo grandes seres humanos.

Nos alegra demasiado esta nueva oportunidad, un reto difícil como el que tuvieron con el Pereira, donde hicieron historia y se fueron en el momento indicado, cuando entendieron que era mejor que llegaran nuevos aires al club.

Son muchas las cosas buenas que podríamos decir de Alexis Márquez y su equipo de trabajo, pero hoy quiero invitar a una reflexión y es todo lo lindo que podemos lograr teniendo como base el ser excelentes personas.

Ya la experiencia se va ganando, cada día se aprende, se corrige, se deja huella en el camino.

Adelante felinos, sigan disfrutando de la fiesta del mundo, en Pereira se les quiere, apoya y se les espera algún día.

KARDO